BASSI QUE SÍ, BASSI QUE NO

A mí, Leo Bassi nunca me ha terminado de gustar. Aclaro: hay veces que no entiendo algunos de sus montajes y de sus chistes, por excesivamente gamberros, pero me cae simpático. Siempre hace falta que alguien se tome en serio su papel de histrión corrosivo e incómodo, y más en los tiemos que corren.

El día 11 y 12 de octubre iba a pasear su Bassibus por toda la ciudad de Murcia, enseñando sus lugares más cutres, como también hiciera en Madrid. En su web, Bassi anunciaba su parada en esta ciudad con un vídeo recordatorio de su otra vistia a Barcelona.

Pero pasa que esas mismas fechas se celebra el congreso regional de Partido Popular, y se ha optado por cancelar esa actuación o posponerla.

Esta actuación se enmarcaba dentro del festival Alter-Arte, y la reacción ha sido rotunda por parte de su director y el resto de su equipo: dimisión inmediata y denuncia de censura. En palabras del director del festival, en un comunicado:

«A tres semanas de la llegada de Leo Bassi a Murcia y con su participación anunciada en rueda de prensa desde el mes de abril, la consejería decide censurarlo por la coincidencia en el tiempo entre el Bassibus, obra del polémico artista, y el desarrollo del congreso regional del PP. La consejería ofreció al artista la posibilidad de aplazar la actuación a otro momento menos molesto, lo que fue rechazado por el artista al entender que limita la libertad de expresión y somete el desarrollo artístico a criterios de oportunidad política partidista»

Sobran las palabras.