Entrevista a Máez

Pablo se llama Máez cuando sube al escenario. Desde hace algún tiempo todo el mundo habla de él, y parece que aún se hablará mucho más. Con referencias musicales muy marcadas, pero con un estilo especial al mismo tiempo, lleva desde hace unos meses preparando el que va a ser su primer disco, "We'll Never Make It Home", del que ya ha dejado algún adelanto en forma de EP o en numerosos vídeos acústicos que encontramos en Youtube.





Tuve la oportunidad de entrevistarlo hace algo más de un año, cuando apenas tenía un par de maquetas y llegaba con la vitola de ganador del concurso Cantigas de Mayo, en Ceutí. Era la una y media de la tarde y tenía cara de recién levantado, seguramente porque vivía en algo parecido a un sueño del que a día de hoy aún no ha despertado. "Y espero no despertarme nunca", me dice cuando ahora hablo con él, apenas unos días antes de la presentación de sus canciones en directo en uno de los festivales españoles más importantes, La Mar de Músicas (Cartagena), donde va a preceder a Carmen Consoli el próximo domingo.

¿Ha cambiado mucho tu vida durante este año?
Sí, en lo que se refiere a la música sí. Ya somos profesionales, estamos a un nivel diferente, dedicándole más seriedad y el más tiempo y trabajo.

¿Estás nervioso antes de ése debut en "La Mar de Músicas"?
Sí, pero más que nervioso la verdad es que tengo ganas de que llegue el momento, de tocar, de estar allí y ver qué dice de la gente.

A través de Internet y las redes sociales casi que hemos seguido el día a día de la grabación de tu primer disco. ¿Cómo ha sido ese trabajo?
Hablamos con Suso Sáez, el productor del disco, y le dijimos que se bajara (desde Madrid) a Cartagena durante una semana. Estuvimos ensayando mañana y tarde y preparando los temas para el disco. Fue gracias a él (y también a los músicos) que el disco suena así. Él nos enseñó a tocar para una grabación, que era lo que íbamos a hacer, y no para el directo. Estuvimos ensayando mucho, porque era un disco que íbamos a grabar en directo...

Un método que parece que no es el más habitual a día de hoy.
Depende del tipo de música, pero es algo que yo agradezco. Cuando es una música acústica, que se basa más en crear el momento que ir pista por pista añadiendo instrumentos, se gana mucho grabándolo así. Aunque también es verdad que es un "pseudo-directo", porque mi voz y la guitarra están grabados después.

Hay muchos cantantes jóvenes españoles que se han sumado a esa nueva corriente de influencias folk. En tu registro te suelen comparar con gente como Ben Harper o Cat Stevens. ¿Te gusta que te comparen o no?
Por supuesto, me suelen comparar con estos artistas. Pero para nada me mete presión. Ben Harper es uno de mis artistas favoritos. Me anima muchísimo y cuando me comparan con él, viendo dónde está, joder, hay que tomárselo genial.

Y todo esto sin publicar ahora tu primer disco. ¿Qué esperas para cuando llegue ese momento?
Pues no lo sé. No me preparo, en realidad espero los acontecimientos. Pero también con el nerviosismo que supone este reto. Aunque la verdad es que las cosas van a pedir de boca.

¿De qué forma vas asimilando los cambios?
Yo me empeño mucho en no volverme "demasiado serio". Es decir, no subir al escenario con un guión. No somos cirujanos, no operamos a corazón abierto ni está en juego la vida de nadie. Estamos haciendo música y es una cosa divertida, hay que mover a la gente. Hay que ser serio y que la música esté bien, pero todo lo demás tiene que ser espontáneo.

¿Qué te ha aportado? Es una pregunta clásica, pero hay que hacerla.
Es una buena pregunta. Porque he descubierto que se puede vivir de algo que me gusta tanto. He ido dando bandazos a nivel profesional, y la música es de lo más grande que he hecho en mi vida.

¿Y se puede vivir actualmente de la música?
Hay que intentarlo y me conformo con poder hacerlo muy modestamente.

Máez publicará su primer disco "We'll Never Make It Home" en otoño. El EP de adelanto, "A Short Version Of I Am What Supossed To Be", ya está disponible en Spotify y iTunes.